
En Chillán se está viviendo uno de esos inviernos épicos que recuerdas por mucho tiempo. La cantidad de nieve caída, incluso más abajo de la base del centro, ha cambiado bastante la fisonomía del paisaje en relación a los últimos años, abriendo nuevas líneas para esquiar que años anteriores solo podías soñar. La última semana nevó más de un metro de nieve polvo seco y lo más importante: sin viento, lo que hizo que muchas de las conocidas líneas de Chillán se transformaran en bajadas perfectas; a varios escuché por ahí diciendo que habían hecho “la mejor bajada de su vida”…
Lamentablemente el fin de semana corrió un viento salvaje que obligo a mantener cerrada la mayor parte del centro el día sábado y barrió con toda la nieve recién caída la semana pasada, dejando grietas y planchas de hielo en varias partes. Sin embargo hay tanta nieve, que eso no es problema para los que estén motivados, ya que es posible andar en muchísimos lugares de la parte baja en donde el viento no llegó con tanta fuerza, y donde incluso ayer domingo todavía encontramos algo de polvo.
Chillán está increíble, para los que no dependen exclusivamente de los andariveles y se animan a las raquetas y al randoneé, este invierno se está transformando en algo de lo cual diremos en el futuro: “¿te acuerdas de la temporada del 2011…?”
Fotos y Texto: Rodrigo Villegas
