Si quieres aprovechar la estadía al máximo, Ski La Parva entrega estos cinco consejos para disfrutar de la nieve en esta temporada y no morir en el intento:
Abrigarse bien. El reto está en disfrutar al máximo la aventura en la nieve y no pasar frío, además de contar con toda la comodidad posible. Por eso, se aconseja usar tres capas de ropa: una primera piel o mallas térmicas, luego una capa impermeable y por último, ropa que pueda parar el viento y a la vez, que sea fácil de quitar en caso de sentir calor. Además, es importante contar con botines antideslizantes para la nieve, guantes, antiparras y gorro.
Cuidarse del sol. Si vas a esquiar o simplemente disfrutar del paisaje, de la misma forma que te proteges del frío es imprescindible el cuidado de la piel. Recuerda llevar protector solar y lentes de sol para evitar posibles quemaduras e incluso insolación, dado que la nieve refleja casi el 80% de la radiación solar.
Alimentación. Generalmente las jornadas en la nieve son de 8 a 10 horas y por lo general, las bajas temperaturas conllevan un gasto de energía superior al consumido durante una jornada normal. Por este motivo es importante considerar llevar o comprar comida con base en proteínas y carbohidratos que compensen la energía gastada. También es importante llevar chocolates o barritas proteicas y frutas fáciles de llevar en la mochila, y por supuesto no olvidar el consumo de líquido.
Mantener el auto en buenas condiciones. Hay que tener en cuenta que se trata de un paseo a la montaña y que es posible que las condiciones climáticas en la altura sean distintas a las de Santiago. Por ello, se recomienda llevar cadenas para la nieve, líquido anticongelante, rascador de hielo, GPS y por supuesto, lo ideal es contar con una revisión previa del auto.
Si viajas con niños. Ir a la nieve con niños y no olvidar nada, pareciera ser una tarea imposible. Hay algunos tips fáciles de recordar y que te permitirán disfrutar de la nieve en familia, sin descuidar la salud de tus pequeños. Ropa ligera y ajustable con las que los niños se sientan cómodos mientras se protegen del frío, además de los accesorios de protección para esquiar como el casco, guantes y botas. Sin éstos no es recomendable sumarse a las pistas, por eso en muchos casos también se pueden alquilar. Es importante no olvidar comida como galletas, frutas y bebidas para cualquier momento en que los más pequeños sientan hambre y llevar bolsas plásticas para guardar las prendas mojadas al regreso. Una muda de ropa adicional también es imprescindible.